La educación financiera es un proceso en el que las personas desarrollan herramientas básicas para administrar recursos, planear y tomar mejores decisiones sobre el uso del dinero. Sin embargo, en México solo el 22% de los encuestados por el test global de Standard & Poor´s (una prueba de conocimiento financiero) aprueba dicho test. Por lo que tener las nociones básicas acerca de temas financieros es hoy en día una de las mejores cosas que puedes hacer.
Pueden existir muchas razones para querer aprender sobre endeudamiento, ahorro, inversión o la manera de evitar fraudes. Sea cual sea la razón, estos conceptos son de ayuda para personas con muchas o pocas cuentas; en pocas palabras todos deberíamos conocer sobre estos temas en nuestras vidas.
Beneficios de la educación financiera
Los beneficios que puedes tener no solo afectan en lo individual, sino también para la economía nacional. Individualmente la educación financiera mejora las condiciones de vida. En el plano colectivo, entre mayor educación tienen las personas, las instituciones tienen clientes responsables e informados y eso facilita la comunicación entre ambas partes, lo que además permite que se les ofrezcan una amplia gama de productos y servicios financieros.
¿Qué conceptos son los más importantes?
Los puntos básicos de la educación financiera se basan en los gastos e ingresos, en general significa que uno no puede gastar más dinero de lo que gana. Cuando logras este equilibrio podrás tomar decisiones como qué porcentaje de tu ingreso puedes ahorrar, en qué momento necesitas un préstamo y pedir un plan de pagos que se adapte a tus necesidades.
Otros conceptos que se habían mencionado antes son el ahorro, la inversión, deuda, inflación e impuestos. El ahorro y la inversión están ligados entre sí, pues sin ahorro no podría haber inversión. La deuda puede ser una buena opción mientras pueda financiar un negocio y a su vez pueda pagarse.
