Sabemos que hablar sobre dinero, presupuesto y objetivos de ahorro puede ser lo menos romántico, pero son conversaciones que se deben tener con regularidad. Ya sea porque están por llegar al altar o ya están viviendo juntos, tener objetivos financieros en pareja es algo fundamental.
“En la pobreza y en la riqueza” es una frase incluida en los votos matrimoniales tradicionales por una razón. Esto porque ambos buscan generar riqueza y mejorar su estilo de vida y, al mismo tiempo, evitar dificultades financieras en el camino.
Establezcan prioridades de ahorro e inversión.
Algunas parejas combinan sus finanzas, mientras que otras optan por mantenerlas separadas. Pueden crear al menos una cuenta para que les facilite el pago de cosas en conjunto. Sea lo que sea que elijan, ustedes deben determinar qué contribuye con qué, así como en qué se ocupa el dinero restante de ese presupuesto. De esta forma, pueden pensar en ahorrar o invertir.
Una vez dado ese paso, escojan los objetivos para los cuales ahorrarán o invertirán ese dinero. Ya sea unas vacaciones, una casa, un negocio o para el futuro de sus hijos. Sea lo que sea, pueden contar con techreo.
Protege a tu familia financieramente
Esto debe ser un objetivo importante y una prioridad. Un seguro de vida, de gastos médicos mayores y de auto, pueden ser la diferencia en caso de algún evento inesperado. En ocasiones, un trabajo puede proveer por ley el acceso a un Seguro Social. En caso de ser trabajador independiente, esos gastos corren por tu cuenta. Considera también un seguro dental, pues uno nunca sabe.
Además, dentro de estos objetivos financieros en pareja, tener un fondo de emergencia es primordial. Este dinero debe cubrir gastos de 3 a 6 meses en caso de perder empleo o por un gasto importante inesperado. De esta forma, no tendrás que usar tus tarjetas de crédito.
Algo que muchas parejas pasan por alto, es la planificación patrimonial básica. Es importante mantener actualizados los beneficiarios en cuentas y realizar testamento.
Metas a corto plazo
Puedes dividir tus objetivos financieros en pareja por el tiempo que desean dedicarles. Algunas de sus metas a corto plazo (menos de 5 años para lograr) pueden incluir:
- Salir de deudas: reserven parte de sus ganancias para pagar las deudas y deshacerse de cosas o hábitos de deuda.
- Mejorar los puntajes crediticios: pueden utilizar una tarjeta de crédito garantizada, la cuál les ayudará a mejorar el score en el buró. Por ejemplo, pueden solicitar Boom C@rd.
- Ahorrar más: consideren los retiros automáticos de su cuenta para que el ahorro se convierta en una prioridad.
- Gastar menos: reserven una cantidad mensual específica para cosas como entretenimiento y cuando hayan gastado esa cantidad en un mes, no podrán gastar más. Fíjate un presupuesto sobre cuánto gastan en ropa, vacaciones, etc. Detengan las suscripciones mensuales que ya no usan o por las que ya no obtienen un buen valor.
Metas a largo plazo
Son objetivos financieros en pareja que tardan de cinco años o más en lograrse. A menudo incluyen:
- Ahorro para comprar una casa: esto puede incluir ahorrar una cantidad a lo largo del tiempo para el pago inicial o ahorrar cantidades para pagar una hipoteca.
- Ahorrar para la educación de un hijo: esto puede incluir un plan de ahorro para educación registrado u otros medios.
- Ahorro para la jubilación: para hacer esto correctamente, completen un plan de jubilación con un asesor que pueda ayudarles a determinar cuánto dinero deberían haber reservado para jubilarse y cuánto necesitan ahorrar cada mes para lograrlo.
Metas de comportamiento financiero
Al adoptar mejores comportamientos financieros, pueden mejorar sus posibilidades de hacer realidad sus objetivos financieros en pareja. Algunos de sus objetivos de comportamiento pueden incluir:
- Establecer objetivos inteligentes (SMART): SMART es un acrónimo en inglés de específico, medible, alcanzable, realista y sujeto al tiempo. Los objetivos que incluyen los cinco parámetros son más fáciles de alcanzar.
- Hacer un presupuesto y ceñirse a él: tener un presupuesto ayuda a garantizar que no se gaste más dinero del que ingresa. Sumar todos sus gastos y luego restar sus ingresos. Si sobra dinero, puede destinarlo a ahorros. De lo contrario, deberán encontrar formas de gastar menos o ganar más dinero.
Sea como sea, haz que las pláticas sobre objetivos financieros en pareja sean divertidas y amenas. ¿Qué tal una “Cita: Viernes de Finanzas”?, en la que marquen la “fecha” en su calendario para discutir y compartir su información financiera entre sí y cómo el hogar está avanzando hacia sus objetivos. O una “cumbre financiera trimestral”, en la que puedan intercambiar la planificación de la agenda para abordar decisiones financieras a corto o largo plazo. Analicen un presupuesto de compras navideñas, la planificación de vacaciones o el seguimiento del progreso hacia la jubilación.
Alcanzar sus metas financieras significa tener objetivos compartidos y ser transparentes entre sí. Al igual que un matrimonio exitoso, se necesita comunicación, compromiso y compromiso para lograr la unión financiera perfecta.
